#LineaCaliente
Nahle, la masacre en Tuxpan frente a la venganza personal en Papantla y Poza Rica
Por Edgar Hernández*
A escasos 90 días de cumplirse un año del trompicado gobierno de Roció Nahle, queda claro que su más importante problema no es la empatía con la ciudadanía que no existe -las encuestadoras la colocaron el pasado fin de mes en el lugar 32, es decir, la peor gobernadora del país-, sino en la alianza de su gobierno con el “Poder Negro”.
Exterminar a sus enemigos a sangre y fuego, sobre todo a la creciente segunda fuerza opositora, Movimiento Ciudadano que nomás no digiere, le es más importante que combatir la criminalidad.
La señora Nahle no sabe o confunde -más bien no sabe- lo que es gobierno, gobernabilidad y gobernanza.
La matanza del fin de semana en el penal de Tuxpan donde el “Grupo Sombra” -nuevo Cartel que sustituye al Jalisco (CJNG) y a del Sinaloa- de manera por demás brutal, dio lugar a la muerte de siete reclusos quienes con cientos más se atrevieron a reclamar orden y justicia carcelaria, así como un alto a la violación de los derechos humanos.
Es un hecho criminal que, en otros momentos y circunstancias, se hubieran tomado cartas a nivel estatal y nacional en el asunto deslindando las responsabilidades de la Secretaría de Seguridad Pública y los negocios de la Secretearía de Gobernación con el “dinero negro” que llega a la oficina Ricardo Ahued a través de su Dirección General de Prevención y Readaptación Social.
Este fin de semana la mandataria desató una escalada intimidatoria contra manifestantes de Movimiento Ciudadano que convocaron a una marcha en Papantla en defensa de sus victorias electorales en Poza Rica y Papantla, mismas que pretende echar abajo para entregarlas a Morena.
La razón es simple, las plazas son la entrada del Huachicol al norte del país.
El despliegue de la Secretaría de Seguridad Pública en Papantla fue impresionante. Cientos de policías y de tránsito mal ocupándose del cierre de vías de acceso a la ciudad, la hostilización a marchistas y amenazas de represión fueron el tono.
No aceptan la derrota.
Nahle odia al dirigente nacional de MC, Jorge Álvarez Maynez y ya no sabe como exterminar el peligro que representa ese partido que va rumbo a la alternancia para 2027-2029 y la disputa por la gubernatura en 2030.
Ello, mientras en el Penal de Tuxpan sucedía un baño de sangre.
Incendio, caos, asesinatos, armas de alto poder de la criminalidad y un saldo de 7 muertos y 10 lesionados. Todo en el contexto del no hay porque exagerar, del no pasó nada, de ocultar la información, del ¡Ya pasará!
Para Nahle y su operador político Erick Domínguez, quien nunca se ocupa de la Subsecretaría de Finanzas a su cargo ya que vive en Poza Rica desde donde opera alianzas con el crimen organizado a través del “Comandante Santoyo”, fue más importante crear un entorno mediático en donde vía gacetillas a la prensa nacional y a sus columnistas a modo buscó desacreditar a los marchistas y a la dirigencia nacional de MC, mas que atender y evitar la masacre de Tuxpan.
Importante, sin duda, entrar al detalle del tema Tuxpan que, de venir de una larga paz social de la noche a la mañana, para ser más exactos de noviembre del año pasado a estas fechas, se convirtió en el más importante foco delincuencial de Veracruz y sede del “Grupo Sombra”.
Relatos del Cereso de esa localidad dan cuenta que todas las noches, todos los días, los reclusos se la pasan pensando se vaya a “soltar la perra” que es el estallido de violencia y muerte en el marco de las protestas por abusos de autoridad.
Son 3 mil 300 los presos en el Centro de Reinserción Social (Cerezo) de Tuxpan en prisión preventiva oficiosa que viven en la permanente zozobra por los chantajes, violaciones y abusos del “Grupo Sombra” que son los que abastecen de dinero al gobierno del estado.
Primero fue la violencia de Álamo donde en días pasados se sucedió la extraña muerte ¡¡¡por infarto!!! de la maestra Irma Hernández a manos del Grupo Sombra y el fin de semana lo de Tuxpan.
¿Qué sigue?
¿Acaso para el olvido las violaciones de los derechos humanos en el penal y la responsabilidad de Seguridad Pública y la Secretaría de Gobierno?
Grabaciones testifican que las autoridades penitenciarias permitían el ingreso de productos ilícitos, adictivos, así como los compromisos con el crinen organizado,
¿Eso no cuenta?
Tampoco lo que está sucediendo en Pacho Viejo, el penal de Coatzacoalcos y los de Pánuco, Jilotzingo, Córdoba, Orizaba y Amatlán, por citar algunos en donde está a un tris de estallar la violencia ante la presencia de la nueva organización criminal, el Grupo Sombra, que sustituye a los Zetas vía gobiernos carcelarios autónomos.
Mañana platicaremos en este espacio la historia de cómo el gobierno abdica a 10 Carteles y organizaciones criminales y dan a luz, con todo el apoyo oficial, al “Grupo Sombra”, en donde atrás está el enlace del gobierno del estado.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo